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Cuando era chica, me asustaban mucho las tormentas, la oscuridad, la soledad… el silencio…
Pero cuando llegaban esas noches, tenebrosas para mi, utilizaba la única arma que jamás falló… cerraba los ojos, los apretaba lo mas fuerte que podía y deseaba con el corazón que la tormenta pasara, que pronto amaneciera, que alguien viniera y me hiciera compañía y que me dijeran palabras lindas, como te quiero o tranquila… entonces algo mágico pasaba.

Cuando era chica, tenía algo que lamentablemente había ido perdiendo, tenía FE, porque antes, cerrando los ojos y deseando con el corazón que nada me pasara, siempre había algo que cambiaba, algo para mejor… Mi fe me ayudaba.

La fe, para mi, es creer en algo aunque no lo podamos ver… perder la fe, es estar convencido de que eso que no está, no va a estar nunca…
Dicen que la fe mueve montañas, pero una montaña de fe mueve mucho más.

… Ahora, que ya he crecido puedo decir que por un tiempo la perdí completamente, me convencí de que las cosas que antes deseaba, ahora eran imposible de conseguir, sabia que eso que no estaba ahora, jamás iba a estar. Pero poco a poco vuelvo a tenerla… 

… Ahora, que ya estoy grande, no es necesario taparme con las cobijas hasta el pelo cuando algo me asusta… ahora simplemente vuelvo a tener fe y desear con el corazón que el miedo pase y que algo mejor venga en camino, porque no hay nada peor que darse por vencido, aún cuando se ve todo negro, cuando no se ve la salida, cuando se cree que no vale la pena seguir creyendo en eso que creías…

Me dijeron que si tengo fe en que mi suerte cambiará, así será… y prefiero creer en eso…
Murphy dice que los sucesos fortuitos tienden a suceder todos juntos. Yo prefiero creer que es una cuestión de fe.

(Espero que este pensamiento, mañana no cambie, si cambia… escribiré algo en relación a eso… pero por hoy, prefiero creer que si recupero la fe.)

sin titulo

Vivimos esperando que la vida nos trate bien, sobre todo cuando creemos ser buenas personas, sin haber hecho nada para merecer algo malo… pero eso, en esta vida, es como pedirle a un león hambriento que no te ataque.
Hay gente que vive tratándose mal, muchas veces sin razón… no sé de quien será la culpa; si del que ataca o del que es atacado, pero no podemos vivir tratándonos así.

Para mi en las relaciones, indirectamente se forma un pacto; un trato, que como en todo, puede ser bueno o malo.
Es como decir, si yo te trato bien, espero que tu también me trates bien a mi, pero que pasa si te trato mal? Tendré que esperar que también tu me trates mal a mi?...

Mmm, creo… que cuando una persona trata mal a alguien, simplemente se está tratando mal a si mismo, porque todo se vuelve en contra.
Podemos golpear con mucha fuerza a alguien, pero ese golpe que dimos, tarde o temprano se devolverá y nos pegará tres veces más fuerte.
Es un problema enorme y que suele suceder, tratar a los demás como queremos que nos traten (Si yo maltrato, recibo maltrato… si yo amo, recibo amor¿?)

Pero que sucede cuando tratamos bien a alguien y sin embargo, ellos nos devuelven maltrato?... Ahí quedamos atónitos, y nos decimos, porqué? Si yo no he hecho nada malo…
Quizá el único consuelo sea pensar, que simplemente nos topamos con alguien, que tratándonos mal, en realidad se maltrata así mismo.

Lo esencial es invisible a los ojos!!.... seré tan esencial que por eso nadie me ve?

Ser invisible es casi como no existir, solo cuando alguien te ve te sientes vivo. Como un fantasma, una sombra que pasa pero que nadie ve.

Pueden decir que eres importante, que sin ti las cosas no serían iguales... pero que mas da, si cuando los necesitas es como si no existieras, como si algo te cubriera e impidiera que los demás noten tu presencia...

Si les importaras, tendrían ganas de acompañarte, de hacerte reir, de contenerte... no escaparían como suelen hacerlo...
Quizás ahí está el problema, eres tan insignificante que las personas a tu alrededor te notan solo cuando algo significativo ocurre, cuando haces algo para llamar su atención... pero a veces los recursos se agotan y creo que ya no sabes a que mas recurrir....

Es como una casa... que en un principio puede haber sido la mas grande, la mas linda... pero que con el tiempo poco a poco se deteriora hasta quedar en nada....